viernes, 7 de mayo de 2021

shh shh

Entre las horas de una cálida noche, me encontraba recostado en el vientre de las sombras, dormía y padecía de un sueño tan ligero y friable como una hoja de papel, apenas mi esencia flotaba entre las nubes de mi psique, mi cuerpo era traído de nuevo a la tierra por un estremecimiento que me recorría por completo, saltaba dentro del mismo cuenco de mi cama, estremecía mis piernas y brazos sobre una sabana blanca vestida del negro de la obscuridad y entre ellas mis brazos abrazaban el torso tostado de una mujer sin nombre, cada uno de mis sobresaltos fueron recibidos por la cintura de esta mujer, me afianzaba a ella como el cascajo real de un naufragio imaginario, en esa noche de horas eternas volví  de mi sueño espasmódico varias veces y solo veía su nuca y espalda innominada y desnuda, después de la tercera vez, entre el sobresalto y la desorientación sentí vergüenza y fue cuando a unos rayos tímidos de sol les susurré mi pena, y el silencio me respondió rozándome tiernamente mi mano con la suya, cómo calmando a un bebé sin sueño.